Nos hemos quedado con el culo pegado a la silla contemplando este despliegue de recursos ante nuestros ojos. Si Tenet estaba llamada a salvar el cine, entonces Dune es la película que lo llevará a la dimensión de los gamusinos.

Bromas aparte, este primer aperitivo en condiciones nos ha dejado un buenísimo sabor de boca. Es una pena que esta joya en potencia llegue en tiempos de pandemia, porque no se le va a hacer justicia. Prueba de ello es que probablemente se retrase su estreno hasta primeros de 2021, visto que WB no quiere arriesgar uno de los estrenos más esperados del año.